En la Casa Aboy, el sábado 16 de septiembre, el Comité de Solidaridad con Cuba expresa gratitud a la niñez cubana y reafirma su compromiso de solidaridad y hermandad.
Queridísimas niñas, niños, jóvenes, hermanos, hermanas cubanas. Mi nombre es Solimar Ortiz Jusino, integrante del Comité de Solidaridad con Cuba en Puerto Rico y de Poetas en Marcha. Antes que todo quiero felicitarle por las exitosas presentaciones que realizaron ayer y hoy. Ha sido una demostración de la importancia de las bellas artes en el desarrollo de cada ser humano desde la niñez. Tengo el honor de dirigirme ante ustedes en Casa Aboy, espacio de defensa cultural y nacional de Puerto Rico. Esta actividad es un pequeño homenaje que se gestó por muchas manos y corazones que tienen un compromiso inquebrantable con la solidaridad y la hermandad entre nuestros pueblos.
Es un abrazo de gratitud y respeto ante su labor artística pues son ustedes un pilar de resistencia ante los atropellos que se comenten contra su pueblo día a día por más de 60 años. Toda su formación cultural y artística nos inspiran a continuar nuestra lucha en contra del bloqueo para que se les respete como seres humanos que tienen derecho absoluto a vivir libres de injerencias políticas externas y a construir un futuro ejemplar para toda la humanidad.
Desde Puerto Rico, llevamos tres décadas de acciones del CSC y la Brigada Juan Rius Rivera. Manos puertorriqueñas han realizado trabajos voluntarios desde antes de que ustedes nacieran. Tal vez, algunas paredes de sus aulas escolares fueron pintadas en un trabajo voluntario de la brigada boricua. Muy probablemente, recibieron algún regalo que salió de un hogar puertorriqueño cuyos residentes no han pisado su tierra cubana. Muchas personas han denunciado la crueldad del bloqueo en manifestaciones, en marchas multitudinarias, han aportado económicamente o han donado su talento para actividades de recaudación de fondos para llevar artículos escolares a Cuba. El trabajo de una hormiguita que carga un solo grano se replica en miles de hormiguitas y alimenta todo un hormiguero. Si vemos el conjunto de acciones que se han hecho en Puerto Rico durante más de 30 años para el pueblo cubano, desafiando las leyes del gobierno estadounidense, podrán entender que todo, al final, es un acto de amor. Ya van varias generaciones de amor, hermandad y compromiso con la justicia y la libertad.
Actualmente, hemos desarrollado una campaña de recaudación de fondos llamada Un Regalo Solidario para la Niñez Cubana destinada a proyectos educativos y artísticos. Este año, los primeros recipientes de este esfuerzo fueron los integrantes de la Colmenita de Moa, la compañía teatral Ronda de los Sueños en Holguín y la escuela especializada del Cerro en la Habana. Aspiramos a que nuestra labor se multiplique y podamos impactar a la niñez cubana como parte de nuestro compromiso de apoyo a su pueblo y para demostrarle al mundo que, Cuba no está sola.
Siguiendo en esa línea, les cuento que, además de las labores voluntarias y de llevar artículos para uso y beneficio de la niñez, Puerto Rico forma parte de la Red Continental Latinoamericana y Caribeña de Solidaridad con Cuba y todas las Causas Justas. En las acciones concretas que llevamos a cabo, destaco que aquí se logramos hacerle llegar medio millón de jeringuillas para que el pueblo cubano pudiera ser vacunado durante la pandemia del COVID – 19. También realizamos acciones cada día 17 de mes para crear conciencia de los efectos del bloqueo y denunciar ese crimen de lesa humanidad. Es una historia donde Puerto Rico y Cuba sigue enlazándose y cada uno de los aquí presentes les expresamos que EL IMPERIALISMO NO PUEDE BLOQUEAR LA SOLIDARIDAD ENTRE PUERTO RICO Y CUBA. Sigan disfrutando de esta noche y les deseamos un buen viaje y llegada a sus hogares. ¡Gracias por traer alegría y sus talentos a nuestro suelo borincano!
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